Os daré cien veces más

Debió de ser ayer cuando el evangelio nos recordaba la gran promesa de "intercambio" que el seguimiento de Cristo suponía para los primeros discípulos. Recordando a Santa Clara, la Dama Pobre de Asís, se nos relataba cómo Jesús aseguraba a Pedro que quien perdiera casas, hermanos, hermanas, padres o madres por el evangelio recibiría cien veces más.

Lejos de este blog poner en cuestión la oportunidad mercantil de tal intercambio, simplemente traigo ese texto a la memoria al recordar el día que hemos pasado, un día y medio más bien de reposo en León, en casa de Hermanos que antes apenas si habíamos visto y que nos han abierto las puertas de su colegio, de su casa, nos han preparado un plato en su propia mesa y nos han despedido esta noche con el deseo de que nuestro camino prosiga con Dios y termine con El en Santiago.

Ha sido una jornada para disfrutar de la ciudad de León, para rezar en la catedral más luminosa de las Españas y, sobre todo, para dejar que Hermanos que ninguna obligación tienen con nosotros se desplacen de sus hogares y vengan a enseñarnos la tierra.

Día de compartir paseo, risas, bromas, técnicas sobre el camino y la montaña, consejos, buen vino, alguna especialidad culinaria de la tierra, algún recodo descnocido de la ciudad.

Salir de casa y ponerse en Camino ha sido en cierta manera imitar el proceso de los primeros discípulos. También, como ellos, nosotros podemos hoy agradecer haber encontrado otra casa donde ha hecho falta, y otros hermanos... Santiago, Isidro, Gonzalo, Agustín, Vicente... y el resto de la Comunidad de León han intentado que nuestro día de descanso recuperase nuestras fuerzas....

"Os queda lo mejor" nos han dicho con la pasión que ponen los hijos de la montaña de León ante su tierra.... De momento mañana la Virgen del Camino será nuestra primera etapa, casi al amanecer, para empreder el ascenso hacia Villalango y más allá.....¡Ultreia!